Un nuevo comentario ANÓNIMO, por supuesto, llegado a nuestra redacción nos insulta llamándonos 'chalao' y mencionando a una tal Engra Robles a la que no conocemos ni hemos mencionado jamás. Lo únicio que denunciamos en una entrada es que en el "concurso" ese llamado Olimpíadas de latín y griego era sospechoso que los institutos de Yecla se llevaran los primeros premios, como si se tratara de un concurso de mises o de unas oposiciones a profesor en la comunidad de Murcia, donde todo está amañado, mientras que los alumnos de ese profesor de griego al que parece referirse nuestro comentarista consiguieron estar entre los tres primeros puestos por méritos propios, sin ayuda de nadie.
Tampoco menospreciamos la formación que algunos profesores que ejercen en Murcia hayan recibido en Andalucía, donde existe una gran dedicación a la Filología Clásica en universidades como la de Sevilla, Granada o Cádiz. Ninguno de los componentes de nuestra redacción guarda relación con la comunidad andaluza y la mayoría somos de sexo femenino, como esta que os escribe.
Nuestra única duda es si este comentario ha sido redactado por Adriano Muñoz Pascual, el hijo de la profesora jubilada del IES Azorín de Yecla que fue enchufado por el director de ese instituto aprovechando que el titular de la plaza fue expulsado por el amiguete de Valcárcel, Jesús Gómez Gómez. Seguro que Adriano estará intentando ligarse a sus alumnas con frases como: Ahora que no somos profesor y alumna...
Por último, amigo comentarista anónimo, ¿sabes lo que significa el verbo murciar? Búscalo en el diccionario de la RAE y aplícate las fábulas de Esopo. Sigue insultándonos, tus insultos son halagos y los tenemos guardados a buen recaudo.
He aquí el comentario:
A ver, tú, chalao: Engra Robles, profesora aludida a lo loco y acusada
de tongo, no fue ni mucho menos alumna de la Universidad de Murcia sino
que, como tú mismo, por si no lo sabías, es andaluza formada en la de
Granada.
Es interina y este curso ya no trabaja en el Castillo Puche. Hay otras
personas, otras maneras, por suerte o por desgracia, aún no se sabe,
aunque tú te arrogarías la clarividencia y seguro que crees que lo sabes
¿verdad?
Y otra cosa: tal es tu inquina y chaladura que tiras contra todo lo que
se menea y se te nota demasiado para que nos creamos tus mentiras. Deja
que los demás trabajen y tú toca tu guitarra en la sombra. Acuérdate de
las fábulas de ESOPO (éste si era listo)
En cuanto al final, más bien habría que decir al enchufado Adriano: deja que otros "trabajen" y deja de acosar a tus alumnas como un pederasta
Por cierto, halopekes no lleva espíritu áspero.
En cuanto al final, más bien habría que decir al enchufado Adriano: deja que otros "trabajen" y deja de acosar a tus alumnas como un pederasta
Por cierto, halopekes no lleva espíritu áspero.
Razón tenéis. ese comentario anónimo, aunque al perecer no le faltan razones, pierde la razón con la palabra "chalao", ¿verdad? Debería haber sido más fino, más acertado, expresar su disconformidad con vuestras opiniones. Por que son opiniones, no certezas, en absoluto.
ResponderEliminarYo también tengo que censuraros en cierta manera que os atreváis a acusar de tongo a un concurso al que en realidad no se presenta mucha gente, y que, de hecho, cuando se presentan de un instituto, como puede ser desde Yecla, acuden bastantes alumnos, los mejores, bien entrenados y formados, por supuesto. De esa manera, no es raro que obtengan premios. LO SÉ POR PROPIA EXPERIENCIA.
No digo nada, pero he dado clase de latín a esos alumnos yeclanos con premio, y me enorgullece que tengan ese pequeño reconocimiento, y me dolería que sospechárais que no lo hubieran obtenido por sus propios méritos. Ahora bien, habéis aclarado el asunto de una manera un tanto elegante, tanto como ese mensaje que reproducís que, excepto la palabra chalao y chaladura, está muy bien compuesto, y de forma muy ladina, puesto que se os escapa lo más grave, algo que no habéis advertido en el final, el típico "acetum" de los epigramas más dañinos:
"deja que los demás trabajen y toca tú la guitarra en la sombra".
La fábula de las hormigas y la cigarra, los que trabajan y los que sestean. Cuidado, os pinta de gandules, de chicharreros, banales, imprevisores... Esto, os lo aseguro, no ha salido del tal Adriano, desde luego, sino de un francotirador.
Esa ya se os ha escapado medio viva, pero debéis llevar más cuidado con las halopékes que pasan por el camino.
Perdonad que no identifique mi procedencia, pero es que yo tampoco tiro con balas de madera...
Un saludo desde Calópolis.
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